Son un tipo de lentes de contacto que, por el material y la forma con la que están hechas, su apoyo no está en la córnea (parte trasparente del ojo), sino en la esclera (parte blanca del ojo).
Este tipo de “apoyo escleral” evita las posibles irregularidades corneales y crea un espacio entre la lente y la misma córnea, que ayuda a mantener el ojo siempre húmedo; mejorando la visión, los síntomas del ojo seco y llegando a retrasar la necesidad de un trasplante de córnea.
Son utilizados para mejorar la visión de pacientes con deformaciones corneales, como en el caso de queratocono, degeneración marginal pelúcida, trasplante de córnea o cualquier otra deformación corneal ya sea o no secundaria a un traumatismo.
Están indicadas a todas aquellas personas que buscan una visión excelente, ya que proporcionan mejor agudeza visual y campo de visión ante cualquier graduación: miopía, hipermetropía y astigmatismos bajos, medios o elevados y presbicia.